El gran poeta ,novelista, dramaturgo, teórico y jefe de la Escuela romántica francesa, considerado «eco sonoro de su siglo», el artista exiliado por su sostenida lucha a favor de la libertad y los derechos humanos, hace oír su voz casi octogenaria para cantar la ternura hacia sus nietos . Como siempre, junto a los inocentes, a los vulnerables, a los desprotegidos. Y como siempre, pero con una riqueza infinita de matices, ascendiendo de lo concreto, particular, terrenal, a lo trascendente: en pocos versos, un universo, un alcance universal. ¿ Qué significa ser niño?¿Qué plenitudes alberga la infancia?¿ Qué es la palabra? ¿Y el silencio? ¿Y la sonrisa? Habla el viejo buen abuelo terrenal impregnado de amor y comprensión, paradójicamente, tan próximo al niño. Y el eco de su bella sabiduría repercutehoy en el alma del lector con toda la energía de una convicción entrañable. |